INAUGURACIÓN MUESTRA COLECTIVA
Martes 26 de marzo, 18.30
hs.
MAM, calle 9 Nº 984, La
Plata
MUSEO DE ARTE Y MEMORIA
COMISIÓN PROVINCIAL POR LA MEMORIA
COMISIÓN PROVINCIAL POR LA MEMORIA
Hay quienes afirman,
sin dudar, que el mundo ha sido injusto desde el origen de los tiempos.
Y tal vez nos hayamos acostumbrado a escucharlos. Pobres muy pobres, ricos muy ricos. Así parecen confirmarlo las múltiples escenas que hemos visto a los largo de décadas. El azar o la naturaleza distribuye y todos se resignan al lugar adjudicado aun antes de nacer. Avanzar o retroceder, subir o bajar, depende de ciertos talentos y capacidades, pregonan algunos. Hay quienes pueden y otros que no. El sentido común se afirma naturalizando las desigualdades, fortaleciendo los muros infranqueables que configuran los ghetos sociales. Sin embargo, la historia enseña que la distribución de bienes es el producto de intensas y violentas disputas.
Y tal vez nos hayamos acostumbrado a escucharlos. Pobres muy pobres, ricos muy ricos. Así parecen confirmarlo las múltiples escenas que hemos visto a los largo de décadas. El azar o la naturaleza distribuye y todos se resignan al lugar adjudicado aun antes de nacer. Avanzar o retroceder, subir o bajar, depende de ciertos talentos y capacidades, pregonan algunos. Hay quienes pueden y otros que no. El sentido común se afirma naturalizando las desigualdades, fortaleciendo los muros infranqueables que configuran los ghetos sociales. Sin embargo, la historia enseña que la distribución de bienes es el producto de intensas y violentas disputas.
La dictadura en la
Argentina no sólo fue una época extraordinaria por la inclemencia del terrorismo
de Estado; también lo fue porque inauguró un proceso de fuerte desigualación en
el seno de la sociedad, que fragmentó y segmentó, fortaleció y debilitó. Tal vez
sus consecuencias no se advirtieron en toda su magnitud sino mucho tiempo
después. La violencia desatada por la dictadura contra los sectores populares y
sus políticas económicas, que concentraron no sólo la riqueza sino también el
poder en pocas manos, permitieron que durante los años noventa el neoliberalismo
profundizara la brecha social.
El juego democrático
aún no ha podido equilibrar la balanza. Hoy, a 30 años del fin de la dictadura,
el deber de memoria deberá ser también el deber por la igualdad.
La obra de Diana
Dowek es la reivindicación del trabajo como parte esencial de la
construcción de la dignidad y la autoestima.
Desde una mirada
emotiva, Mariano Sapia nos acerca, a través del color, a la vida
cotidiana en los márgenes de las ciudades.
Las imágenes de
Daniel Corvino nos trasportan al espacio de la lucha y el reclamo, las
calles, las marchas y la movilización.
Eduardo
Maradei nos interroga desde
el vacío y nos permite pensar en las diferentes maneras de habitar el espacio.
Arde! usa las premisas que
guiaron las prácticas de arte y política a partir del siluetazo: la resistencia
a obras de lectura lineal o directa y el despliegue en el espacio
público.
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